¿Cuánta publicidad vemos al cabo del día?
Y no sólo me refiero a spot publicitarios, sino a gráficas en revistas, en periódicos, vallas publicitarias, carteles en la calle, marquesinas de autobuses, los propios autobuses, en el metro.... Cientos de anuncios al cabo del día, pero, ¿cuántos de esos anuncios recordamos al irnos a la cama? Pocos. Estoy seguro de que si ahora te pido, así rápido, en menos de un minuto, que me digas al menos 10 anuncios que hayas visto hoy, lo tendrías complicado. Es normal, no te preocupes. Estamos sometidos a tanta publicidad, que directamente la omitimos, ni nos damos cuenta de que está ahí, nuestro cerebro la verá (o eso dicen algunos), pero tú ni te acuerdas. Por eso, es importante que un anuncio se diferencie del resto, que sea distinto, que nos haga reír, que nos emocione.
La creatividad es algo muy complicado. Es difícil no caer en los estereotipos. Una vez, asistí a unas conferencias en las que un gran realizador del mundo de la publicidad aseguraba que en este mundo ya está todo inventado, que lo único que se hace es volver a pensar lo pensado y darle una nueva perspectiva para que parezca distinto.
A lo que iba, que me despisto. Estamos tan sometidos a tanta publicidad, que sólo los anuncios más creativos captan toda nuestra atención y hacen que los recordemos. Por ello, es imprescindible que la gente que queremos vivir de este mundillo empecemos a darle al coco, y repensar lo pensado.
Os dejo como regalito un vídeo que llamó mi atención y hace que siempre me acuerde de él. Se titula "Logorama", y es un cortometraje animado francés de 16 minutos, dirigido por François Alaux, Hervé de Crecy y Ludovic Houplain y producido por Autor de Minuit. El film presenta diversas situaciones ocurridas en un Los Angeles repleto de más de 2,500 logos y mascotas de diversas compañías. Ganó el Premio Kodak en el Festival de Cannes del 2009, y el Óscar al mejor cortometraje animado en la gala del 2009.
Para que veáis que con tocas las marcas que vemos al día podríamos hacer todo un mundo aparte.
Vedlo porque merece mucho la pena